Desde el alma: la fotografía Kirlian
(Este texto apareció en la revista EXACTAmente, Nro 16)

Guillermo Giménez de Castro
guigue@craam.mackenzie.br

Noviembre de 1999

Creer en la fase espiritual de nuestra existencia es una de las características del ser humano que se remonta a la Noche de los Tiempos. Sin embargo el Siglo XX ha sido pródigo en intentos científicos por demostrar la existencia de esa fase. La fotografía Kirlian es un ejemplo. Aunque hoy en día algunos partidarios de la misma niegan cualquier conexión con el alma y apuestan en su capacidad de diagnóstico, tampoco son capaces de explicar las supuestas relaciones que la imagen tiene con la fisiología del ser vivo.


En 1939, el ingeniero soviético Semyon Davidovich Kirlian, trabajando en la ciudad de Krasnodar inventó un equipo sofisticado con el que pretendía estudiar a la naturaleza. El equipo recibió posteriormente su nombre: Cámara Kirlian, nombre con el que hoy en día es aún conocido. En los últimos 60 años mucho se ha discutido sobre la interpretación de las fotografías obtenidas, así como el origen de la radiación captada. Aunque la técnica no alcanza una divulgación popular, sus adherentes suman por millares en el mundo entero: un famoso buscador de páginas de la Internet acusa la existencia de más de 16.000 páginas dedicadas a la cuestión.

La polémica sobre la técnica kirlian comienza ya por su origen. En Brasil claman que el sacerdote Landel de Moura, de Rio Grande do Sul habría inventado su cámara de electrografía en 1904, básicamente similar a la de Kirlian, pero que las autoridades ecleciásticas lo obligaron a abandonar sus estudios y divulgación. El sacerdote parece haber tenido una portentosa imaginación ya que, afirman en Porto Alegre, él habría patentado la radio anos antes que Marconi en EEUU.

En todo caso, sea quien fuere su autor, la técnica es la siguiente: se somete el objeto en estudio (generalmente un ser vivo, la mayoría de las veces un ser humano) a altos campos eléctricos (30.000 Volts) con baja corriente variando con un determinada frecuencia durante un cierto período de tiempo (100 a 200 s), el campo eléctrico también puede ser pulsante. El objeto entonces comienza a emitir una descarga luminosa que es registrada por medio de una película fotográfica. En la Figura 1 mostramos la fotografía kirlian de un dedo. La parte central oscura, es el dedo, el halo coloreado, es el aura. La técnica es sorprendente y capaz de generar hermosas imágenes como la de la Figura 2, obtenida de una moneda de 10 euros.

       

Figura 1                                            Figura 2


 
 

De que se trata esa aura? Básicamente aire ionizado por causa del elevado campo eléctrico. Nótese en las figuras como el aura tiene una estructura filamentaria, con delgados hilos saliendo del objeto en estudio. Una característica esencial de toda fotografía kirlian, entonces, es que sea tomada en un ambiente gaseoso, cuando la foto es tomada en cámaras de vacío el efecto no se produce (descartando así cualquier interpretación sobrenatural del fenómeno). Otro requerimiento es humedad, fenómeno natural en todo ser vivo generado a través de la transpiración. No es necesario que la humedad provenga del objeto en estudio, puede ser colocada expreseamente, o puede usarse ciertos tipos de aceites también.

Es interesante el hecho de que la fotrografía puede ser tomada después de retirar el objeto de la placa sobre la que normalmente es apoyado. Esto es simplemente así porque la humedad condensó sobre la placa formando la imagen del objeto. Por increible que parezca, experimentos de laboratorio muestran que la fotografía puede ser tomada hasta tres días después.

A pesar de que explicaciones más o menos sencillas pueden ser dadas a la fotografía kirlian, esta aún continua fascinando a muchos. Ocurre que ella se presenta como una confirmación de algunas ideas religiosas o místicas. El aura sería una manifestación del alma, nuestra contraparte espiritual. Infelizmente para los crédulos, no hay ningún cuerpo etéreo sino aire ionizado y humedad o vapor de agua.

Otros, sin embargo, no ven en la fotografía kirlian un fenómeno paranormal pero creen que la técnica es útil para revelar el estado de una persona, tanto físico como síquico. La primera experiencia al respecto ocurrió por azar: una persona fue fotografiada antes y después de recibir un susto y se verificó que ambas fotos eran distintas. Nuevamente la explicación es sencilla: la transpiración de nuestra piel responde a nuestro estado de ánimo circunstancial (fenómeno que intentan explotar los detectores de mentira, por ejemplo). Luego, ambas fotografías deben ser distintas. Los kirlianólogos, sin embargo, afirman poder diagnosticar todo tipo de males: el Profesor Newton Milhomens de Brasil afirma que la figura 1 que ilustra este artículo corresponde a una persona en estado depresivo. Con la misma técnica él dice ser capaz de identificar a un egocéntrico, alguien con una inflamación o un intoxicado. Él no cree que la kirliangrafía, como la llama, sea una foto del espíritu, pero provee una exótica teoría para-electromagnética para explicarla: un nuevo campo de radiación disponible por la materia. Esto es lo que en ciencia se llama hipótesis ad hoc o, más popularmente, God in the gaps (Dios en las brechas), o sea como no podemos explicar el fenómeno con la ciencia conocida, simplemente lanzamos una hipótesis nueva y dejamos a los demás su confirmación. Demás está decir que semejante artificio científico es por demás censurado en la ciencia. Es cierto que a veces es empelado, pero sólo de forma muy especulativa y obviamente que precisa confirmación posterior.

La cuestión es, si no sabemos de que se trata un efluviograma (como también es llamada por algunos autores) hecho reconocido por sus propios partidarios, como podemos usarlo para algún diagnóstico? Descartada ya la hipótesis paranormal de que la kirliangrafía retrata el alma humana, lo que nos resta es apenas un efecto curioso, sin duda de gran impacto, pero vacío de información útil.

La fotografía kirlian no parece presentar mayores desafíos a la ciencia establecida. No conozco ningún uso del efecto en ninguna área de investigación , aunque los kirlianólogos afirman que existen. Dudo mucho que un efecto represente algún potencial de interés, si en los últimos 60 años pocos son los científicos que se dedicaron a él. Su origen aconteció en una época en que la física pasó por un período particularmente fenomenológico. A fines del Siglo XIX, los científicos fueron descubiendo una serie de fenómenos que no podían explicar: el espectro de las substancias gaseosas, los rayos catódicos, X, alfa,beta y gama. Pero junto con esta serie de hechos que más tarde consiguieron explicación racional , otros aparecieron que, o bien nunca fueron replicados por otros laboratorios (notablemente los Rayos N) o simplemente no se mostraron como fenómenos distintos y por lo tanto perdieron relevancia.

La fotografía kirlian sobrevivió al olvido sobre todo por la fase mística que algunos quisieron imbuirle. Sesenta años más tarde a su estblecimiento, los pocos que aún intentan encontrar una propiedad sobrenatural, o aquellos que intentan darle un status científico que no lo consiguió, confunden o se aprovechan de los legos crédulos.


Erratum. En el artículo sobre  el biorritmo (El escarabajo no es un paralelepípedo) afirmamos que un día tríplemente crítico acontece cada 23 x 28 x 33 = 21.252 días. En realidad no es así, ocurre con bastante mayor frecuencia. La razón se debe al hecho de que tal como el gráfico muestra, se asume un valor constante para el estado  biorritmico durante un día entero. Siendo así, y llevando en cuenta que la función varía bruscamente (la variación de fase diaria del ciclo femenino es de 15.6 grados, la del masculino es de 12.9 y el intelectual 10.9), producen cambios de signo triplemente concurrentes de forma más próxima que la citada. Calculándolos para más de 100 años (40.000 días), yo hallé 54 días triplemente críticos, o sea cada 2 años aproximadamente. Aunque la distribución no es equiespaciada.